Miércoles 20 de Agosto de 2025.- Aunque la Iglesia católica considera a san José un modelo y un ejemplo de virtud desde hace muchos siglos, se ha escrito relativamente poco sobre la devoción hacia él.Muchos santos, además, han subrayado la devoción a san José como manera de acercarse a Jesús.
Igual que quien se acerca a la Virgen María es llevado más cerca a Jesús, el que se dedica a san José podrá tener una relación más profunda con Dios.
El objetivo final, obviamente, no es la adoración a san José – dado que la adoración se reserva sólo a Dios –, sino la imitación de su virtud y de su ejemplo, que nos lleva más cerca de Dios.
En declaraciones a ACI Prensa, el P. Donald Calloway, sacerdote de la Congregación de Clérigos Marianos y escritor devocional, explicó a CNA -agencia en inglés del Grupo ACI-, las razones por las que la consagración al padre adoptivo de Jesús se está volviendo muy popular entre los católicos al igual que la consagración a María con el método de San Luis María Grignion de Montfort.
Para el sacerdote, una de las razones por las que la consagración está aumentando de forma rápida es porque “el mundo está hambriento de buenos padres”.
El sacerdote explicó que la gente se le acerca con frecuencia “tan confundida acerca de la época en la que vivimos en lo que respecta al matrimonio y la familia. Y hoy tienes todas estas cosas de ideología de género. La gente está realmente confundida sobre lo que significa ser un hombre, lo que significa ser una mujer”, dijo.
También, “tenemos mucha gente con muchas heridas paternales y padres ausentes. No saben lo que es un padre y nunca han experimentado a su padre amoroso o un padre presente en sus vidas”, añadió. Según los datos del Censo de 2017 en Estados Unidos, más de uno de cada cuatro niños está creciendo en un hogar sin padre.
El P. Calloway dijo que además de una crisis de paternidad en las familias, la Iglesia misma también está experimentando una crisis de padres espirituales.
Explicó que esto se debe a los sacerdotes, obispos y cardenales que han sido declarados culpables de “cosas pecaminosas y criminales” en los recientes escándalos de abuso sexual. “(Han) lastimado a mucha gente. Causó mucho escándalo. Y la gente ahora está sedienta de un buen padre”.
Convencido de que la intercesión y el ejemplo de San José son la clave para sanar la confusión que la gente experimenta, el P. Calloway, gran devoto del santo, preguntó en el Vaticano y en varias órdenes religiosas si existía una consagración oficial en la Iglesia Católica. Tras enterarse que no había, decidió crearla, pues “el mundo necesita a San José ahora más que nunca”.
Es así que por tres años investigó, oró y compiló una consagración al esposo terrenal de la Virgen y padre adoptivo de Jesús.
El P. Calloway explicó que “la palabra ‘consagración’ técnicamente significa dejar algo a un lado para un propósito santo. Consagramos altares, por ejemplo, porque los vamos a usar para la Misa. O consagramos a personas que tenemos en comunidades religiosas y demás”.
En ese sentido, la nueva consagración a San José significa “que reconoces que él es tu padre espiritual y quieres ser como él. Para demostrarlo, te entregas enteramente a su cuidado paterno para que te ayude con amor a adquirir sus virtudes y a ser santo...José, a su vez, brindará a sus consagrados su amorosa atención, protección y guía”.
La primera persona que se entregó al cuidado espiritual de José y María fue Jesús, “así que nos entregamos como lo hizo Jesús cuando era niño. Vivía bajo su techo, estaba bajo su cuidado […] Así que eso es lo que es, confiarnos a la paternidad espiritual de San José para ayudarnos a crecer en virtud y más cerca de Cristo”.
El sacerdote dijo que debido a la popularidad de la consagración mariana, algunos católicos le preguntaron si la consagración a San José les quitaría de alguna manera su consagración a María.
“La respuesta es no, porque no somos miembros de una familia espiritual monoparental”, dijo. “Entonces, cuando nos consagramos a María o José, básicamente nos estamos confiando a su cuidado espiritual, porque son nuestros padres espirituales”, agregó.
El P. Calloway dijo que la consagración a San José tiene similitudes con la consagración a María que ofrece el método de San Luis María de Montfort. Por ejemplo, ambas duran 33 días, y el formato general consiste en reflexiones diarias sobre la vida y virtudes de San José y oraciones especiales.
“En el siglo XVIII, cuando ‘De Montfort’ ideó su método, lo hizo 33 días, lo cual era realmente bueno, porque si solo fueron como cinco o nueve días, no es suficiente, realmente no vas a ser capaz de cubrir una gran cantidad de material”, y “si son como tres meses, la gente va a decir, sí, esto es demasiado. Entonces, un mes es una buena cantidad de tiempo”, dijo.
El libro del P. Calloway también incluye reflexiones sobre las “maravillas de San José” con eventos milagrosos atribuidos a su intercesión, oraciones adicionales como las Letanías de San José y la novena de la Santa Capa de San José, otras oraciones de santos y Papas dedicadas a San José y guías para los que dirigen grupos pequeños de consagración.
“Diariamente pasas por algunas lecturas, lees los títulos, los honores, los privilegios asociados con San José...y luego, terminas cada día con algunas oraciones. Al terminar diré: ‘¡Realmente conozco a este tipo ahora. Realmente siento que lo quiero como parte de mi vida espiritual’”.
Al igual que la consagración mariana, la consagración a San José se puede realizar individualmente o en un grupo pequeño, y su aceptación es rotunda. “Hasta ahora a la gente le encanta, y las parroquias y lugares que lo están haciendo. Es increíble, casi no podemos satisfacer la demanda”, dijo el sacerdote.
Me gustaría que parte del fruto de la consagración sea “la afirmación de que tenemos un padre amoroso en San José, y que nunca nos hará daño. Él está ahí para nosotros y es un buen padre que quiere que sus hijos lleguen al cielo. En última instancia, como la Virgen María, él no se señalará a sí mismo, sino que nos señalará a Jesús y nos ayudará a crecer”, dijo.
Fuente : https://mariamatermisericordiae.blogspot.com/p/ca-san-jose.html