"La crisis que nunca se ha podido acotar" (por Aldo Ortiz Pardo)

Domingo 05 de Septiembre de 2021.- Por más extraño que parezca, la crisis estructural que padece Chile no ha bajado su intensidad, sino que está en una incomodísima latencia. Latencia que hemos visto con las fragmentaciones y renuncias en masa desde los bloques políticos que asumieron la representación de las legítimas demandas sociales tras el Estallido de 2019. Desde la justicia que se pidió al exigir más y mejores derechos para todos los chilenos y que luego mutó en una Convención Constituyente que debe tener la misión de escribir la Nueva Constitución (cuyos resultados no voy a discutir en esta Crónica).

La latencia en la crisis también se ha vivido en los bloques políticos hegemónicos. La tradicional oposición de izquierda agrupada en Nuevo Pacto Social - la misma que obtuvo el poder bajo el nombre de Concertación de Partidos por la Democracia en 1989 tras las primeras elecciones presidenciales luego de 17 años de militarismo - ha vivido esta crisis de forma muy especial. De ser una corriente de presidenciables - Aylwin, Frei y Lagos - para pasar a una difícil y casi indomable Nueva Mayoría - cuya mandataria Michelle Bachelet tuvo que soportar las indecibles ansias de más poder de sus propios aliados hasta el punto de no dejarla gobernar muchas veces - hasta ser lo que es hoy. Un grupo de partidos que busca junto a Yasna Provoste (DC) el recuperar el camino del presidencialismo perdido tras un mensaje de unidad y apartado cuidadosamente de los extremos políticos que causaron el final desastre de la administración Bachelet.

La derecha agrupada en Chile Vamos - hoy Chile Podemos Más, en lo que convengamos decir que es un mal chiste copiado de la tristemente célebre coalición "Podemos" española - con la crisis y el estertor final del gobierno de Sebastián Piñera, gobierno partido en dos tras el Estallido Social y que nunca pudo leer en la cancha el partido que los movimientos sociales y la población planteaba - sólamente buscando difíciles acuerdos con la oposición - hoy en día plantea un escenario casi rocambolesco para sus candidatos al parlamento y al CORE, como lo son el cuadrarse (amenazas mediante) con el ex Presidente del Banco Estado y actual candidato oficialista, Sebastián Sichel - un continuista desde todo punto de vista - con la postura del rechazo al Cuarto Rescate del 10% de los fondos de las AFP. Algo desde todo ángulo, una postura contra la gente y contra sus necesidades.

Por lo tanto, si nos damos cuenta que la crisis sigue golpeando no tan sólo a los sectores políticos, sino también a sectores tan emblemáticos como la Iglesia Católica o los medios de comunicación - ambos con sendos casos llevados a la Justicia por atrocidades sexuales con disímiles resultados - nos damos cuenta que la credibilidad de todas estas reparticiones enfrentan fundamentalmente el mismo problema, como lo es el que ya poca gente les cree, y es deber de ellos mismos, el recuperar la confianza que nunca debieron perder. 

Chile es un país de confianzas y de apoyos duraderos, y si lo que buscamos es evitar otro Estallido Social, lo que debemos hacer entre todos para evitarlo, es evitar su causa y fundamento, esto es, la terrible injusticia social y la falta de confianza en quienes deben liderar al país.

Escrito por : Aldo Ortiz Pardo. Fundador de RCI Medios y Candidato a CORE independiente por Atacama