Reportaje : Mapa de la rebelión de las regiones. Desde Calama a Magallanes, pasando por Atacama, Coquimbo, el Maule, Biobío y la Araucanía

Lunes 05 de Marzo de 2012.- "Santiago es Chile", "no existe regionalización" y "el centralismo nos asfixia". Estas y otras frases son las que han provocado el despertar de las provincias y el grito de guerra hacia una administración que ha tenido que actuar sobre la marcha. 

CALAMA Y COPIAPO.  El 29 de junio de 2011, el 80% del comercio, el 60% de los servicios públicos y el 100% del transporte público de Calama paralizaron sus actividades acusando "abandono" por parte del gobierno central. Además, demandaron la reinversión en la comuna de por lo menos el 5% de los cuantiosos beneficios que genera el mineral que se explota en la zona, algo así como 4.000 mil millones de dólares desde las divisiones de Codelco Chuquicamata y Radomiro Tomic.

La actividad contó con 20 mil personas en las calles y una caravana de 3.000 autos. Fue liderada por el alcalde Esteban Velásquez y tuvo como eslogan "Producimos cobre, seguimos pobres". En la oportunidad, el edil tildó el evento como "un primer paro de advertencia. No tenemos universidad estatal, no hay grandes parques y la infraestructura es nula en nuestra ciudad. No tenemos los recursos para llegar a mínimos estándares y llamarnos ciudad".

En respuesta, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, se comprometió tres veces a pronunciarse sobre estas y otras peticiones: julio, diciembre de 2011 y marzo de 2012, lo que no ha calmado el sentir de la Asamblea Ciudadana. Acá dirigentes como María Pastén, Luis Rosas (taxis colectivos), Jacqueline Echeverría, Daniel Ramírez, (ex trabajador de Chuqui), Águeda Rivera (profesora), Hernán Alvarado (transporte público) y Rosa Trigo (salud municipalizada), entre otros, han sido la cara visible de la molestia. De hecho, hubo un segundo paro a fines de agosto que incluyó un concurrido acto y fuertes cacerolazos.

Daño ambiental

El viernes 25 de febrero de 2011 la Comisión de Evaluación Ambiental (Conama) de la Región de Atacama, dirigida por la intendenta Ximena Matas, aprobó el proyecto de la central termoeléctrica Castilla, la que se construirá a 80 kilómetros al sur de Copiapó, con una inversión de 4.400 millones de dólares aportados por el empresario brasileño Eike Batista.

La indignación de la ciudadanía y de los grupos ambientalistas creció luego que el Seremi de Salud, Nicolás Baeza, cambiara la catalogación de la iniciativa desde "contaminante" a "molesto", lo que motivó la presentación de un recurso ante la Corte de Apelaciones.

El 14 de mayo los habitantes salieron a la calle, motivados por las marchas estudiantiles y la aprobación de HidroAysén. Y claro, aprovechando la visita del ministro Laurence Golborne, a propósito del primer aniversario del rescate de los mineros, fue "funado" por dirigentes y manifestantes. 

(Informa : Cambio21)